El último año en Andorra, se ha notado un aumento respecto a las residencias pasivas. Muchas personas de diferentes nacionalidades eligen el Principado para hacer del país su residencia habitual.
Las residencias pasivas son todas aquellas personas que viven en el país, pero no trabajan en el principado. Una de las diferencias entre la residencia pasiva y la de las personas que tienen la residencia porque si trabajan en el país, es que estas últimas si tienen derecho a la seguridad social andorrana.
Por lo tanto uno de los requisitos de la residencia pasiva es el de disponer de seguro médico, invalidez y jubilación que tenga cobertura en Andorra:
Reembolso de todos los gastos médicos en el país (tarifa CASS) + en todos los centros concertados en España por la compañía.
Cobertura en caso de invalidez total y póliza de ahorro rescatable a 5 años.
*Los menores de edad y los mayores de 60 años, únicamente necesitarán el seguro médico.
Además de la asistencia sanitaria para los residentes pasivos, contamos con un abanico de más de 50 productos, tanto en el ámbito personal como en el de empresa, que pueden complementar las necesidades de todos los residentes pasivos, más allá de cumplir con los requisitos legales que exige el permiso de residencia pasiva (auto, hogar, inversión, empresa, etc...)
Para poder solicitar la residencia pasiva, de acuerdo con la legislación vigente, se tienen que ejecutar los siguientes requisitos:
Finalmente, una vez nos han aprobado todo el proceso y nos han validado la residencia, esta se otorga por un periodo de dos años, después se renueva para dos años más, la siguiente renovación por tres años, y las sucesivas por un periodo de diez años.