Sufrir daños por nieve es una de las cosas más comunes que podemos sufrir durante el invierno. La nieve se acumula en los tejados, y su peso va incrementando día a día, lo que puede provocar daños en nuestro techo. Es por ello que deberíamos preocuparnos de retirar la nieve cuando se acumule para evitar males mayores. En caso de no poder hacerlo nosotros mismos, hay profesionales dedicados a esta actividad. Aunque representan un sobrecoste, la alternativa sería mucho peor.
A todos nos gusta ver nuestra casa iluminada y decorada en cada rincón, las luces de todos colores por toda la casa hacen un ambiente muy jovial y navideño. Debemos tener cuidado, sin embargo, y evitar sobrecargas de nuestra instalación eléctrica. Podríamos causar daños al cableado interno de nuestro hogar, y en algún caso incluso quemarlo, lo que podría provocar un incendio dentro de casa.
Dependiendo de donde vivamos, las temperaturas pueden bajar tanto que encender la calefacción o la estufa serán las únicas soluciones para soportar el frío intenso del invierno. Es por este motivo que debemos comprobar el buen estado y funcionamientos de nuestros calefactores, chimeneas, y cualquier otro dispositivo que empleamos para mantenernos calientes.
Uno de los consejos más obvios, pero también más importantes para el invierno es la de mantener todos los accesos a la casa libres de nieve y hielo. No sólo para nosotros, pero una entrada resbaladiza podría llevarnos problemas si alguien se lesiona por culpa nuestra. Así que no olvidemos coger la pala cada cierto tiempo, y quitar la nieve y el hielo. Si queremos también podemos añadir productos antideslizantes o anticongelantes para no tener que hacerlo tan a menudo.
Para la mayoría de nosotros, la rutina no cambiará, independientemente del frío o del calor. Así que seguiremos cogiendo el coche para ir al trabajo, a hacer la compra o buscar a nuestros hijos en la escuela. Debemos ser mucho más prudentes a la hora de conducir con condiciones de frío. Recomendamos retirar el hielo y la nieve del coche (techo, parabrisas, puertas, capó, luces ...), esperar unos minutos para que el coche se caliente y asegurarnos de que la carretera no está helada. También no olvide respetar los límites de velocidad, y en la medida de lo posible, conducir más lentamente de lo que normalmente haríamos, a la vez que aumentar la distancia de seguridad con otros vehículos que podamos encontrarnos.
Con ASSAP, tu hogar estará siempre seguro: SEGURO HOGAR